Sobre memoria y modelos mentales (y así es la cosa)

Ayer se presentaron las ideas de investigación en la clase de Human Information Processing. En 5 minutos debíamos presentar nuestra propuesta, explicar el experimento a desarrollar y los resultados esperables. Dos ideas llamaron mi atención.

La primera, referida a cómo las situaciones que incorporan emocionalidad son mejor recordadas. En este contexto, pienso en que cuando intento recordar situaciones del semestre recién pasado lo primero que se viene mi mente es un paseo que hice a Niagara Falls con un grupo de amigos. Fue muy bello el viaje en sí, pero también conversamos sobre hartas cosas personales que, por supuesto, involucraron emocionalidad. Y efectivamente, es una de las cosas que más recuerdo del semestre. Así, cobra sentido la cita que Mónica tiene en su perfil de Facebook: "Las personas pueden olvidar lo que les dijiste, las personas pueden olvidar lo que les hiciste, pero nunca olvidaran como los hiciste sentir". Al incorporar la componente emocional, las personas recuerdan fácilmente lo que sintieron y en consecuencia, les costará poco asociar y recordar lo que les hiciste o dijiste.

La segunda idea tiene relación con nuestros modelos mentales y cómo se sincronizan con nuestro comportamiento. Si sabemos que robar es malo y a pesar de eso robamos, pueden ocurrir dos cosas:

• Que justifiquemos el robo para que no tenga conflicto con nuestro modelo mental. En este caso estamos modificando nuestra percepción de realidad para hacerla coincidir con nuestro modelo mental.
• Cambiar nuestro modelo mental. "Robar en realidad no es malo", en este caso estamos modificando nuestro modelo mental para hacerlo compatible con una realidad inobjetable*.

Estoy escribiendo a la hispana. En inglés, siempre expresas la idea principal al comienzo y luego te explayas. En este post, me explayé y ahora voy a lo medular: Para ser exitosos en nuestras relaciones, es importante entender los dos conceptos mencionados y aplicarlos de modo adaptativo según las personas y las relaciones. Las experiencias emocionales las recordaremos fácilmente (una decepción por infidelidad, la falta de cariño, la felicidad producto de una actividad compartida, etc) y estamos expuestos a que nuestra escala de valores cambie o a tergiversar la realidad para hacerlas coincidir.

* Basándose en Kant, no seríamos capaces de conocer dicha "realidad inobjetable". De esta página, cito "para Kant nuestra mente influye en el objeto conocido, pero más allá de la realidad conocida hay otra realidad plena, independiente de nuestro pensamiento, incognoscible pero cierta: la cosa en sí; para el idealismo hegeliano, todo es producto del pensamiento, no existe esa supuesta realidad en sí que esté más allá de lo conocido". En cualquiera de los dos casos, si la realidad en si no existe o no somos capaces de conocerla por nuestros sentidos, lo único que nos queda es el modelo personal de realidad que creamos al experimentar nuestra existencia.